¿En qué consiste la ptosis palpebral?
La cirugía de ptosis palpebral es de los problemas oculoplásticos más comunes, debido a la caída o posición anómala de uno o ambos párpados superiores. En estos casos las personas son incapaces de abrir los ojos con normalidad, pudiendo verse afectada la visión por un fallo de apertura palpebral.
Tratamiento:
Esta patología se diferencia, a nivel de tratamiento, en aquellas que producen alteraciones visuales, y las que no. En el primer caso la cirugía ptosis palpebral se hace necesaria para conservar la visión, en el segundo se trata de pacientes que acuden al especialista buscando una mejoría estética.
En niños en los que se diagnóstica que la ptosis está causando una afectación visual, deben ser operados de forma precoz e inmediata para evitar que en un futuro puedan tener consecuencias visuales permanentes.
¿Cómo se realiza?
Estas cirugías consisten en la manipulación y refuerzo de la aponeurosis del músculo. Son cirugías sencillas, predecibles y con excelente pronóstico. En aquellos pacientes que responden a la estimulación del ojo con ptosis con gotas de fenilefrina al 10%, la cirugía puede realizarse de forma más sencilla, predecible e incluso sin tener que practicar corte alguno en la piel del párpado.
Síntomas:
Los síntomas varían en función del grado de esta, pudiendo ser leve, moderada o grave. Puede haber reducción del campo visual en una ptosis leve y en casos moderados/graves, el párpado puede cubrir gran parte de la pupila, comprometiendo la agudeza visual enormemente y debe ser tratado para evitar un ojo vago o ambliopía (en niños).
Duración: de 30 a 45 minutos por ojo aproximadamente.
Dolor: Hematoma, molestia los primeros días.
Incapacidad: Reposo los primeros días.